9.7.08

Mensaje número 100

Ya va para unos tres años, el desencanto con los foros de Internet, con sus malos entendidos, sus "trolls" y demás me llevaron a un primer intento de "jubilación forense" cuyo trauma intenté mitigar creando una bitácora. Fue ésta; en principio no trataba sólo del mundo bibliotecario, mi profesión, sino que también abarcaba dos de mis mayores aficiones: la música y los ferrocarriles. No había pasado ni un año cuando, en la mejor tradición bibliotecaria, decidí "escindir el título" y dejé estas líneas sólo y exclusivamente para ocuparme de mi campo profesional.

En estos 100 mensajes (que en realidad son unos pocos menos... o unos pocos más si cuento los que borré en un mal momento) he escrito de todo: sobre las patadas que damos a nuestra lengua en aras de una presunta modernidad que no es más que pedantería y superficialidad (si sólo cambiamos la forma de llamar las cosas, estamos aviados), sobre "apuntófagos", sobre aburridos dilemas como el del intrusismo o el de "biblioteca/sala de estudio", sobre nuestras crisis de identidad, sobre las grandes oportunidades que nos ofrece la tecnología (¡la biblioteca 2.0!)... Y últimamente sobre Second Life, ese metaverso que posiblemente nos hace vislumbrar la futura interfaz de la Red.

Aunque sea muy tópico, llegado este momento quiero dar las gracias a los 15.652 visitantes que en alguna ocasión han echado una ojeada a estas pantallas desde el 6 de febrero de 2006 hasta las 9.26 horas de esta mañana del 9 de julio de 2008, justo tres años y cinco días después de mi primer mensaje en una bitácora. Espero cumplir muchos más años y muchos más mensajes...